Allá por el mes de abril de 2007 nació este blog. No lo pensé mucho a la hora de poner nombre a la url o a la hora de darle un título. Tenía claro que quería que fuera un reflejo de lo que soy, ecléctico por encima de todas las cosas, y soñador, por encima de otras. Abanderando el tecnicolor y el eclecticismo comenzó mi andadura blogger.
Las primeras entradas venían provocadas por la expectación que supone el contar tu vida a través de un diario virtual. En mi caso, la repercusión que puede llegar a tener o no este blog, no es algo que me haya preocupado. De hecho algunas entradas han venido provocadas por estados emocionales muy fuertes que simplemente necesitaban ser compartidos en un medio antiséptico. Sin contraprestaciones, como aquel que dice. El llegar a más o menos público nunca ha sido un objetivo. El expresarme de una forma libre y creativa, jugando con las palabras, deleitándome con las imágenes o hiriendo con el teclado, son una máxima a perseguir.
Esto ha sido así desde hace ya casi año y medio. Mis pasiones, mis odios, mis rencores, mis prejuicios... han embriagado más de una entrada, convirtiéndolas en cartas abiertas de sincera admiración a cineastas, dramaturgos o escritores o dagas envenenadas contra este mundo, contra los otros o contra este que se hace llamar Bossie, pero que se llama Juan. Es curioso, como algunas veces hablar en tercera persona ha servido para desnudar mi alma de una manera franca o como algunas veces esta misma tercera persona no ha sabido ni quien era.
Las personas que han transitado por mi vida, en mayor o menor medida, también han estado aquí. Algunas permanecen, otras han salido. Pero todas ellas han influido en quien soy. Es curioso, como las entradas más personales, por decirlo de alguna forma, han venido de las relaciones socio-emocionales. Tanto por la exaltación de la amistad o por la perdida de esta, la esperanza de un amor nuevo... Aún queda mucho camino por recorrer. Compartiendo emociones y sentimientos que espero poder seguir reflejando a mi manera. ¿Cómo, si no?
La ciclotimia, la locuradelcoño y por supuesto la Santísima Virgen del Coño, también estan por aquí. Las entradas más excéntricas, exóticas, variopintas o toda aquella situación suceptible de ser subrrealista han supuesto un punto de inflexión humorístico entre tanto pesimismo existencial o extásis vital. Así soy, una montaña rusa de emociones digna del más lúgubre parque de atracciones.
¡Sí los sueños son en tecnicolor, la vida es en dolby surround 3D!
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