Un
mundo en continuo cambio. En constante movimiento. Un mundo donde las
ideas son papel mojado. Noticias de ayer que servirán de alimento a
una población hambrienta de conocimiento o simplemente de codicia,
ansia por el chisme o por el cotilleo que se usa para desgracia del
prójimo. Nada permanece en una sociedad donde lo corrupto es la ley
que impera, sobran los discursos y las acciones no son más que
eventos, acontecimientos que rememoran un pasado en ruinas. Así, los
valores humanos, si es que existen, se transmutan y cambian de color.
Color político roído por el color económico con símbolo monetario
de una moneda que aún no está inventada. El euro no ha cumplido el
gran sueño europeo. ¿Dónde queda el intelectual, el poeta? Al
parecer está relegado a la oscuridad, a la soledad intelectual. La
soledad es su único y amargo compañero. El intelectual ya no se
puede erigir en su tribuna del saber puesto que el discurso
sociopolítico, o de cualquier índole, está al alcance de
cualquiera con acceso a la información. Noticias. En un mundo donde
manda el Capital no manda marinero. Las jerarquías impenetrables
son aquellas más debiles y por tanto más corruptibles. El poder se
desquebraja por la naturaleza de su ilógica existencia o, simplemente, hablando desde un punto de vista más llano, cualquier
voz disidente a un sistema en decadencia es suprimida, ejecutada o
expulsada del mismo. El funcionamento del sistema es enfermo y
continuamente inestable.
0 Comentarios:
Publicar un comentario