El otro dia tuve la oportunidad de visionar una pelicula que tenia muchas ganas de ver... Era como hacer un recorrido por las decadas que han marcado el s. XX a traves de los ojos de un joven que desde el dia de su nacimiento ya estaba digamos que marcado por diversos acontecimientos que harian de su existencia algo realmente especial.Una gran pelicula con una fotografia impecable y unos manejos de camara cercanos al videoclip.Una historia de busqueda y autoaceptación en la que se deja entrever la medida que tiene lo que un tercer individuo puede opinar acerca de nuestras vidas.Una tragicomedia alocada ligera pero a la vez conmovedora y profunda que no deja a nadie indiferente.Con una banda sonora impresionante donde se repasan los exitos de grandes como David Bowie o Pink Floyd.
Sin dudar este ha sido uno de los acontecimientos que ha marcado este fin de semana que comenzo de una forma un tanto precipitada un jueves por la tarde que no termino como todos.
Cuando a una persona a la que vez tan cercana como lejana,tan desconocida como familiar le abres tu corazon y dejas entrever mas alla de lo que normalmente muestras te queda una sensacion de desasosiego al no saber a que enfretarte despues de haber dado paso.No sabes el cariz que tomaran esos acontecimientos y simplemente te preguntas el porque de haber hecho y creo que hoy he llegado a la conclusion de que fue un acto de libertad.Fue liberador poder expresar lo que sentia con franqueza,sin poses ni artificios... solo yo y mis sentimientos.Es algo que recomiendo que se haga.Ademas de comprarse un Vogue que algunas personas no les vendria nada mal
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