¡Mamá, quiero ser artista!. No de una forma tan yé-yé pero si con la misma
contundenciale comunique a mi madre, que lo mio era puro teatro y no en
el sentido estricto de la canción, sino como algo que forma parte de mi, inherente
a lo que soy yo como persona, tan fácil como que yo no soy yo, sin teatro.
Cosas de la vida y de la televisión autonómica, esa misma tarde estábamos viendo
un programa de reportajes, para mas señas "Madrid Directo" y casualmente
se hablaba de la inauguración de un aula de Arte Dramático municipal, de esto hace
ya siete años. Sin pensarlo dos veces, hice la pregunta: Mamá, ¿Puedo?.Dicho y
hecho con 13 años me vi inscrito en un curso de teatro.No se si porque fue
el primero o simplemente porque el paso del tiempo hace que las cosas se
magnifiquen,guardo un recuerdo muy grato de esta etapa de mi vida,de los
compañeros, de los profesores y sobre todo de esas pequeñas pinceladas que
se comenzaban a dar en mi escasa vida teatral, en este lienzo en blanco,
en esto que se conoce como ser actor.
Durante los tres años siguientes estuve en la escuela.Pase a un nivel superior de
aprendizaje teatral.Picoteando de la comedia o del drama e intercalando unos
conceptos que aun a día de hoy arrastro conmigo, formando parte de mi bagaje,
formando parte de lo que hoy soy.Parece mentira como estos años han influido en
la persona soy hoy y por supuesto en ese profesional de la interpretación que aspiro llegar a ser.
Esa persona que soy, que siente de una manera especial, que ve con otros ojos
la realidad que lo inunda todo y sobre todo que se deja llevar por su
imaginación, llegando incluso a volar.Desgraciadamente no se vive entre
strass y terciopelo.La realidad es tan cruda que a veces es pornográfica, vulgar
y carente de sentido.Pero es en ella donde estamos inmersos aunque aveces
ahogue y no queda mas remedio que salir a flote y elevarte para alcanzar
este mundo que siento que se me escapa.
Volviendo a la Tierra y dejando atrás mis lunas de Saturno, aunque hay días
que preferiría seguir allí.Aunque pensándolo bien con -163 Cº y sin oxígeno
no se yo si estaría del todo cómodo.El caso es que aquí me hayo y con una
profesión tan incierta como la vida misma, por eso me apasiona.Amo la vida,
amo el teatro.Hace no mucho escuche que el teatro era La concentración
de la vida misma.En este jugo de experiencias, acciones y conflictos me
quiero mover.Quiero beber de este zumo sin aditivos, ni conservantes.
Embriagarme con sus aromas, deleitarme con sus mieles y sobre todo
cegarme por la luz incandescente de los focos.
Algunos piensan que para ser libre debes renunciar a una parte de ti mismo,
sera que no han experimentado la majestuosa libertad que se siente al estar en un
escenario, al poderte comunicar y expresar de forma que llegues a un grupo
de personas.Que pueden ser 10, 100 o 1000 pero sabes que de una u otra forma
tu mensaje llega.La cantidad como en tantos aspectos de la vida, queda reducido
a un simple dato carente de significado e importancia.
Hablamos de pasión, hablamos de entrega y de compromiso con lo que haces,
con lo que eres y con lo que piensas.Yo, como artista en potencia y digo
en potencia, porque aun me queda mucho camino por recorrer, muchas
situaciones por las que transitar y sobre todo, mucho que aprender.
Y no hablo de modestia, ya que creo que la modestia en esta profesión
no tiene cabida, hay que saber quien eres y que cualidades tienes o puedes
llegar a tener.No hay porque ser una Penélope Cruz y ponerte unas pestañas
postizas para ser la imagen de un producto de belleza,
porque ella lo vale, no se trata de eso.Se trata de un sentimiento que esta por
encima de cosas tan superflúas y vacías en contenido.Es ponerte en frente ante
ti mismo, reconocerte y decir aqui estoy yo con mis circunstancias y
estoy dispuesto afrontar, con mas o menos gracia, todo lo que se avecine.
Acontecimientos que están por llegar, conocimientos que tengo que adquirir
y tantas cosas que parece que haga falta un gran espacio en mi interior
para saber salvaguardar todo esto.La mayor parte de estos conocimientos,
son herramientas que llevadas a la practica hacen que adquieras una técnica
y sobre ella poder crear, que es en definitiva lo que se persigue.O por lo menos
ese es mi objetivo.Es como si tuvieras un salvavidas sobre el que apoyarte y al
que siempre recurrir.
Es como si de se tratase de un jardín árido, que necesita cuidados específicos.
Un riego constante, un abono de gran calidad y como no entrega, dedicación y
disciplina.Es un compromiso para toda tu vida y como tal lo tienes que
defender, ante opiniones contrarias que lo ven como "son cosas del niño"
o el tan utilizado "ya se le pasará", como si tuviera una enfermedad terminal o algo
por el estilo.No voy a negar que para muchos de los que me rodean lo que hago no
tiene ningún merito y no es digno de ser llamado profesión, luchar contra mentes
cuadradas que solo ven y disciernen en blanco y negro es una perdida de tiempo.
Llega un momento en que prefiero hacer como si de un muro se tratase y dejarlos
a ellos en su obtusa ignorancia, tengo cosas mas importantes de las que
preocuparme y no en si mi modo de vida es aceptado o no, ya que no
sólo me refiero a lo que hago o a lo que quiero dedicar mi tiempo, hablo algo que es
tan mio, como mi propio Yo.
El teatro es un amante furtivo que muchas veces se te escapa, te enreda y tú
simplemente te dejas caer rendido a sus pies, te dejas embriagar por su esencia
y muchas veces te sientes perdido.Tan perdido que dejas de vivir por ti, te obnuvila
la concepción del mundo trastocando todo aquello que pensabas que era
importante, para en el ultimo aliento regalarte una sensacion, tan inexplicable
como el porque de que un día nazca irremediablemente tras otro.
[Pequeño extracto de mi primer trábajo para clase]
contundenciale comunique a mi madre, que lo mio era puro teatro y no en
el sentido estricto de la canción, sino como algo que forma parte de mi, inherente
a lo que soy yo como persona, tan fácil como que yo no soy yo, sin teatro.
Cosas de la vida y de la televisión autonómica, esa misma tarde estábamos viendo
un programa de reportajes, para mas señas "Madrid Directo" y casualmente
se hablaba de la inauguración de un aula de Arte Dramático municipal, de esto hace
ya siete años. Sin pensarlo dos veces, hice la pregunta: Mamá, ¿Puedo?.Dicho y
hecho con 13 años me vi inscrito en un curso de teatro.No se si porque fue
el primero o simplemente porque el paso del tiempo hace que las cosas se
magnifiquen,guardo un recuerdo muy grato de esta etapa de mi vida,de los
compañeros, de los profesores y sobre todo de esas pequeñas pinceladas que
se comenzaban a dar en mi escasa vida teatral, en este lienzo en blanco,
en esto que se conoce como ser actor.
Durante los tres años siguientes estuve en la escuela.Pase a un nivel superior de
aprendizaje teatral.Picoteando de la comedia o del drama e intercalando unos
conceptos que aun a día de hoy arrastro conmigo, formando parte de mi bagaje,
formando parte de lo que hoy soy.Parece mentira como estos años han influido en
la persona soy hoy y por supuesto en ese profesional de la interpretación que aspiro llegar a ser.
Esa persona que soy, que siente de una manera especial, que ve con otros ojos
la realidad que lo inunda todo y sobre todo que se deja llevar por su
imaginación, llegando incluso a volar.Desgraciadamente no se vive entre
strass y terciopelo.La realidad es tan cruda que a veces es pornográfica, vulgar
y carente de sentido.Pero es en ella donde estamos inmersos aunque aveces
ahogue y no queda mas remedio que salir a flote y elevarte para alcanzar
este mundo que siento que se me escapa.
Volviendo a la Tierra y dejando atrás mis lunas de Saturno, aunque hay días
que preferiría seguir allí.Aunque pensándolo bien con -163 Cº y sin oxígeno
no se yo si estaría del todo cómodo.El caso es que aquí me hayo y con una
profesión tan incierta como la vida misma, por eso me apasiona.Amo la vida,
amo el teatro.Hace no mucho escuche que el teatro era La concentración
de la vida misma.En este jugo de experiencias, acciones y conflictos me
quiero mover.Quiero beber de este zumo sin aditivos, ni conservantes.
Embriagarme con sus aromas, deleitarme con sus mieles y sobre todo
cegarme por la luz incandescente de los focos.
Algunos piensan que para ser libre debes renunciar a una parte de ti mismo,
sera que no han experimentado la majestuosa libertad que se siente al estar en un
escenario, al poderte comunicar y expresar de forma que llegues a un grupo
de personas.Que pueden ser 10, 100 o 1000 pero sabes que de una u otra forma
tu mensaje llega.La cantidad como en tantos aspectos de la vida, queda reducido
a un simple dato carente de significado e importancia.
Hablamos de pasión, hablamos de entrega y de compromiso con lo que haces,
con lo que eres y con lo que piensas.Yo, como artista en potencia y digo
en potencia, porque aun me queda mucho camino por recorrer, muchas
situaciones por las que transitar y sobre todo, mucho que aprender.
Y no hablo de modestia, ya que creo que la modestia en esta profesión
no tiene cabida, hay que saber quien eres y que cualidades tienes o puedes
llegar a tener.No hay porque ser una Penélope Cruz y ponerte unas pestañas
postizas para ser la imagen de un producto de belleza,
porque ella lo vale, no se trata de eso.Se trata de un sentimiento que esta por
encima de cosas tan superflúas y vacías en contenido.Es ponerte en frente ante
ti mismo, reconocerte y decir aqui estoy yo con mis circunstancias y
estoy dispuesto afrontar, con mas o menos gracia, todo lo que se avecine.
Acontecimientos que están por llegar, conocimientos que tengo que adquirir
y tantas cosas que parece que haga falta un gran espacio en mi interior
para saber salvaguardar todo esto.La mayor parte de estos conocimientos,
son herramientas que llevadas a la practica hacen que adquieras una técnica
y sobre ella poder crear, que es en definitiva lo que se persigue.O por lo menos
ese es mi objetivo.Es como si tuvieras un salvavidas sobre el que apoyarte y al
que siempre recurrir.
Es como si de se tratase de un jardín árido, que necesita cuidados específicos.
Un riego constante, un abono de gran calidad y como no entrega, dedicación y
disciplina.Es un compromiso para toda tu vida y como tal lo tienes que
defender, ante opiniones contrarias que lo ven como "son cosas del niño"
o el tan utilizado "ya se le pasará", como si tuviera una enfermedad terminal o algo
por el estilo.No voy a negar que para muchos de los que me rodean lo que hago no
tiene ningún merito y no es digno de ser llamado profesión, luchar contra mentes
cuadradas que solo ven y disciernen en blanco y negro es una perdida de tiempo.
Llega un momento en que prefiero hacer como si de un muro se tratase y dejarlos
a ellos en su obtusa ignorancia, tengo cosas mas importantes de las que
preocuparme y no en si mi modo de vida es aceptado o no, ya que no
sólo me refiero a lo que hago o a lo que quiero dedicar mi tiempo, hablo algo que es
tan mio, como mi propio Yo.
El teatro es un amante furtivo que muchas veces se te escapa, te enreda y tú
simplemente te dejas caer rendido a sus pies, te dejas embriagar por su esencia
y muchas veces te sientes perdido.Tan perdido que dejas de vivir por ti, te obnuvila
la concepción del mundo trastocando todo aquello que pensabas que era
importante, para en el ultimo aliento regalarte una sensacion, tan inexplicable
como el porque de que un día nazca irremediablemente tras otro.
[Pequeño extracto de mi primer trábajo para clase]
2 Comentarios:
¡Qué bonito y qué maravilloso! Si ya lo dije yo en un momento pero lo repito hoy aquí...
¡¡¡ERES COPLA!!!
Sin palabras. Es muy coherente, lo qu has escrito. Y es que a veces para desnudarse, no hace falta actuar...
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